miércoles, 20 de julio de 2011

Pizzolas.

El otro día me metí en la página web de Whole Kitchen para buscar alguna receta interesante, y acabé mirando la revista del mes de marzo. Me llamó la atención esta receta, las Pizzolas, publicada por SandeeA, de "La receta de la felicidad".


Tenía los ingredientes y era fácil así que...



No hice la receta exaaaaaactamente igual porque en casa no somos mucho de tomate, así que no le puse. Y dividí las cantidades para que salieran la mitad. 



Fueron un éxito total, perfectas para picar o tomar, por ejemplo, a media mañana.


El toque del orégano es perfecto, y el ajo en polvo me sorprendió, me quedé como diciendo "¿Qué, ajo? ¿Eingg?" pero que va, no sabían a ajo, tenían un punto que me encantó.

Pero bueno, a lo que iba:
(Gracias SandeeA y Whole Kitchen por esta fantástica receta!)

Ingredientes

150 g. de agua a temperatura ambiente
12-13 g. de levadura fresca
1 cucharada de miel
1 cucharada de orégano
1 cucharada de ajo en polvo
5 g. de sal
50 g. de tomate natural triturado (yo no le puse)
1 chorrito de aceite de oliva
50 g. de aceitunas sin hueso
50 g. de bacon (yo puse 75 g.)
25 g. de mozzarella rallada (yo puse 50 g.)


Elaboración

Colocamos en un bol la harina. Con los dedos deshacemos la levadura por encima, formando migas.
Hacemos un hueco en la harina. Vertemos el agua y el tomate (si lo ponemos), y espolvoreamos la sal. También añadimos la miel. Por último, el ajo en polvo y el orégano.

Mezclamos hasta que comience a cohesionar, momento en el que pasamos a amasar. Es una masa que resulta muy fácil de amasar, y eso me encanta.

Cuando tiene una textura lisa y elástica, añadimos el chorrito de aceite. Amasamos hasta que esté todo totalmente integrado. Formamos una bola que dejaremos reposar en un lugar cálido (ahora en verano está bien a temperatura ambiente) durante una hora.

Mientras cortamos el bacon y las aceitunas en trocitos.

Pasado el tiempo de reposo añadimos el queso rallado, las aceitunas y el bacon y amasamos bien.

Dividimos la masa en bolitas, que colocamos en un molde múltiple para muffins enharinado.
Allí las dejamos reposar, tapadas con un paño, durante 30 minutos.

Precalentamos el horno a 200 ºC, y pasada la media hora, pintamos las pizzolas con aceite de oliva (de esta forma se doran más y cogen un sabor muy bueno) y horneamos unos 10 o 15 minutos.








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